Procedemos de la luz y, sin embargo, somos de la luz. Y somos mucho más sabios de lo que podríamos llegar a imaginarnos. Lo único que tenemos que hacer es acordarnos.
Procedemos de la luz y, sin embargo, somos de la luz. Y somos mucho más sabios de lo que podríamos llegar a imaginarnos. Lo único que tenemos que hacer es acordarnos.