Nada está quieto, nada en silencio
La vida late, en un pulso eterno
En el ser más grande y el más pequeño
a través de las galaxias y de los cielos
Viento que murmura entre las hojas
Danza frenética de la llama roja
Agua fluyendo en ríos y olas
Raíces profundas, huesos de roca
Energía girando en espiral infinita
Trayendo y quitando la luz y la vida
El mayor misterio es una semilla
Venid a mí, escuchad a vuestra hija
Ahora que se equilibran el día y la noche
La tierra renace y se cubre de flores
Los animales se unen, Diosa Eostre
Vuelve la esperanza nueva y joven
En esta fiesta del huevo y la liebre
Planto una semilla de amor que crece
Germina, brota firme y verde
Me cura, me limpia, me hace fuerte
Esperanza, amor, fuerza y belleza
Creced en el mundo con luz nueva
Vida en movimiento, que gire la Rueda
Que en mí también se haga Primavera
Valariel