
Andamos por la vida buscando cosas, pero sin obtener satisfacción duradera. Llegamos sin nada y obviamente nos marcharemos sin nada, pero aún sabiendo eso, la idea es acumular más y más cosas.
Nadie nos enseña que debemos encontrarnos a nosotros mismos, que debemos comprender lo que somos y unir poco a poco nuestra estructura despedazada.
Entre la Mente, el Cuerpo y el Ser, debería existir una profunda unión consciente:
«La mágica conexión Cuerpo-mente-ser»
La vida del ser humano es demasiado compleja, porque hay una desunión en toda su estructura física-mental-emocional.
La mente dirige al cuerpo y el Ser queda prisionero y aislado. Las emociones quedan a la orden de la mente, de las reacciones del cerebro.
Por lo tanto, el desequilibrio se pierde porque la computadora opera al cuerpo con puras reacciones, todo el proceso del cuerpo se vuelve mecánico, hay mente pero no una consciencia, unos robots cualquiera habitando el planeta. ¿Y luego que sigue cuando la computadora dirige el cuerpo mecánico? Pues la desunión sigue empeorando y ahora la mente comienza a destruir al cuerpo, las emociones se vuelven en su contra.
El cuerpo por sí mismo no puede destruirse, pero la mente puede despedazarlo a través de las emociones.
Entonces, el ser humano va por la vida sin comprender porque sucede lo que sucede afuera, jamás piensa que todo viene de dentro, de la desconexión interna de todo el mecanismo.
La mente está tan empoderada en la creación de problemas, que si te sientas o te acuestas con los ojos cerrados, inmediatamente crea un miedo o una ansiedad, entonces comienza un diálogo interno:
-¿Qué haces? ¿Por qué estás quieto? ¡Levántate! ¡Haz algo!
La mente no está acostumbrada a ser observada y a estar un estado de tranquilidad, siempre intentará crear una ansiedad, alguna incomodidad como una gran comezón o mucho miedo. Porque es en el silencio y la tranquilidad donde el Ser consciente sube a la superficie y aquieta a la mente. Y si el Ser aquieta a la mente, la mente aquieta a las emociones, y las emociones aquietan al cuerpo.
Meditación, esa es la medicina que sana, la medicina que crea la conexión «Cuerpo-Mente-Ser» y mejora nuestro diálogo interno.
motivando.tu.alma21









